Terminar un discurso público o una buena charla es como terminar una buena obra de teatro, película o canción. Se abre captando la atención del oyente, se desarrolla punto por punto y luego termina con fuerza.
La verdad es que si no sabes cómo terminar un discurso, es posible que se pierdan los puntos clave. Las palabras que digas al principio, y especialmente al final de tu charla, se recordarán por más tiempo que casi cualquier otra parte de tu discurso, por lo tanto es una oportunidad única.
Ahora que ya sabes cómo iniciar un discurso, ¿Cómo terminas un discurso y obtienes la ovación de pie que te mereces? Sigue leyendo para descubrir cómo…
Contenido
Cómo preparar el final de un discurso
Algunos de los grandes discursos de la historia han terminado con palabras poderosas y conmovedoras que perduran en la memoria. La mente humana anhela estructura y límites definidos: un comienzo y un final claramente definidos. Cuando proporcionamos esto a nuestros oyentes, procesan lo que se dice con menos esfuerzo y les resulta más fácil de recordar.
Practica
El final de tu charla es de forma natural un punto importante para cualquier audiencia. Las últimas palabras para terminar un discurso brindan una oportunidad única de incrustar un mensaje en la mente de tus oyentes.
¿Cuántas veces has escuchado una presentación que se apaga lentamente y termina sin dar un sentido a al contenido? ¡Es asombroso cuántos presentadores parecen sorprendidos por el final de su propia charla! Aparece la diapositiva final y el orador dice: «Oh, um, supongo que eso es todo. Entonces … um, ¿alguna pregunta?
Y, sin embargo, el final de una presentación es un momento crucial para aprovechar todas las palabras que has dicho hasta entonces.
Credibilidad
Un final débil disminuye tu credibilidad. ¿Por qué? Cuando la audiencia no obtiene la estructura que anhela, las ideas expuestas parecen más débiles, menos importantes, menos memorables, menos completas. Y debido a que es el orador el que genera esta combinación insatisfactoria, hace que automáticamente pierda autoridad.
Por el contrario, tener un final fuerte y relevante aumentará tu credibilidad, satisfarás a tu audiencia y aumentarás tu confianza en ti mismo.
La expectativa de la gente es que un discurso se termine bien, que el final complete al resto del discurso. Tus últimas palabras pueden cristalizar tu mensaje y activar a tu audiencia.
Carisma
Los buenos humoristas a menudo terminan con una broma fuerte y una buena reacción de la audiencia, en lugar del final que planearon. Están en sintonía con la oportunidad de cerrar con una nota alta. Se vuelven expertos en finales y tú también puedes.
7 Maneras de terminar un discurso con ejemplos
Aquí hay siete formas efectivas de terminar un discurso. Cada uno asegura que tu discurso termine con fuerza en lugar de caer tristemente hacia el olvido. Para determinar cuál de estos usar, pregúntate qué quieres que la gente sienta tras escuchar tu discurso. Por ejemplo;
¿Quieres motivarlos a trabajar más duro?
¿Quieres que se unan a la causa que estás promoviendo?
¿Quieres que recuerden a una persona y sus cualidades únicas?
Empecemos!
1. Utiliza un mensaje final preparado
Empieza planificando tu discurso preparando el mensaje que quieres que tu audiencia se lleve. Debe ser lo primero que prepares y lo último que digas en tu discurso.
Escríbelo, pero con las palabras que dirías al hablar. Mucha gente escribe en «lenguaje corporativo» que no fluye cómodamente cuando sale de su boca. Imagina a tu audiencia y crea un mensaje de 1 o 2 frases que quieras que se lleven.
Ejemplo: «Este producto le permitirá ahorrar dinero al …» o «Estamos donde debemos estar con los objetivos de ventas de este mes porque …» o «Hay 2 razones por las que este proyecto es necesario. Primero X, segundo Y «.
2. Termina el discurso con una declaración, no con una pregunta
Una reflexión ascendente se realiza en forma de pregunta. La reflexión hacia abajo es una declaración. Una pregunta y / o una reflexión ascendente implican que vendrán más y por lo tanto no funciona bien para terminar.
Cuando sabes que tienes un final fuerte, automáticamente hablas con certeza, lo que hace que sea más fácil agregar impacto con tu voz y enfatizar tu mensaje.
3. Proporciona una señal
Dale a tu audiencia una señal de que se acerca el final para prepararlos para tu final memorable.
Por ejemplo: enfréntate a la audiencia. Respira profundamente o haz una pausa larga antes de tu declaración final. Di algo como; «Para terminar», «En conclusión» o «Esto es lo que se debe hacer a continuación».
Esto prepara su mente para que su declaración memorable termine un discurso.
4. Termina diciéndoles qué HACER
Muchos oradores esperan que su audiencia actúe, pero no lo solicitan. Si deseas que tu audiencia haga algo, es mejor que lo digas, termina un discurso con una llamada a la acción o muéstrales los pasos de cómo hacerlo.
Por ejemplo: «Asigne un presupuesto para financiar la etapa 2 del proyecto para que podamos garantizar los beneficios X, Y, Z» o «Necesitamos que nos brinde sus comentarios en un plazo de 24 horas …»
5. Haz referencia a un punto anterior de tu presentación
Un “Inicio-Fin” es un término que usa en la radio para colocar un anuncio o promoción al principio y al final de una pausa. El recurso “Inicio-Fin” también aprovecha la respuesta de la mente a la estructura de tu presentación. Al principio proporciona una cita, un ejemplo, una historia, un hecho o una cifra impactantes que enfatiza la necesidad de un cambio, etc. Si luego repites esto al final cobra vida porque el contenido de tu charla le ha dado un mayor significado.
Un cierre de título es donde le da a su discurso un título provocativo que encapsula su mensaje. Tu presentación da cuerpo a tu argumento. Luego, use el título de su discurso como palabras de cierre para conmover a su audiencia e incrustar su mensaje.
6. Cierra con una historia
Cuando llegue al final de su charla, puede decir:
«Déjame contarte una historia que ilustra de lo que he estado hablando …»
Luego cuenta una breve historia con una moraleja y cuéntale a la audiencia cuál es la moraleja.
No dejes que ellos mismos lo averigüen.
A menudo, puedes cerrar con una historia que ilustre tus puntos clave y luego se vincule claramente al mensaje clave que estás haciendo con su discurso.
7. Pon la pantalla en blanco
Si está usando diapositivas, consida dejar la pantalla en blanco , lo que cambia el estado de ánimo de la sala y vuelve a enfocar a la audiencia en tí mientras entregas tu mensaje clave.
Conclusiones
El santo grial de la comunicación es crear un mensaje transferible, que se genere un boca a boca. Ese impulso hace o deshace el éxito de un proyecto. La prueba definitiva de su mensaje: ¿los miembros clave de tu audiencia se lo repetirían a sus amigos o colegas?
¿Podrían recordar su mensaje un día después? ¿Una semana después? ¿Podrían repetirlo a sus colegas en la gran reunión del próximo mes cuando realmente tomen la decisión?
Prueba tu mensaje en voz alta y observa si puedes «escucharlo» repetirlo. ¿Fluye de tus labios? Si es así, sabrás que tiene un final poderoso para tu presentación.
Estás allí para transmitir un mensaje que pueda recordarse más tarde, y si no terminas bien un discurso, pone en peligro la recuperación.